Peñíscola y el cuidado de sus monumentos

Peñíscola es una de las localidades más peculiares de la geografía española. Anclada en el Mediterráneo dispone de unas espectaculares playas donde disfrutar del sol y del mar, pero su cultura supera incluso a la belleza de sus costas.

El casco antiguo del pueblo se encuentra en una península amurallada y coronada por un castillo, lo que lo transforma en una imagen única y preciosa. Pero mantener en pie esas construcciones que la hacen única tiene un gran trabajo por detrás. Se requieren de estudios del terreno periódicamente para asegurarse de que no existen problemas ni movimientos que provoquen derrumbamientos.

Cada cierto tiempo se realizan cuidados para evitar los asentamientos del suelo, se suelen utilizar técnicas como la instalación de micropilotes o las inyecciones de resina expansiva para solucionar este tipo de problemas y permitir a todos seguir disfrutando de un lugar tan maravilloso.

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